lunes, 14 de julio de 2008

UNA LLAMADA AL LECTOR

Querido amigo:

Hace tiempo estuve en el río Nasdivia. Sí, ese río que tiene, seguro, un nombre distinto para cada uno, ya que se encuentra ubicado en los entresijos de la capacidad de necesidad de cada uno.
Dado que este medio posee una formación magnifica, y seguro que en algún momento alguno de vosotros, raros lectores, habéis estado en el Nasdivia, os pido que si habéis encontrado alguno de vosotros, algún folio escrito sobre algún personaje definido me los hagas llegar, para que de esa manera pueda, podamos, entre todos los paseantes del Nasdivia (que de seguro a partir de este momento seremos miles, pues son miles los que se acercan al río) recomponer la visita de este raro espécimen a nuestro mundo.
Caminando por la rivera del río Nasdivia encontré unos cuantos folios diseminados por todo el terreno, por lo que intuyo que alguna otra persona al pasear por las orillas del Nasdivia puede haberse encontrado otros. Sé que deben existir esos otros escritos perdidos porque en uno de los que he encontrado hace referencia al devoto y al distante.
Es posible que entre todos logremos recuperar todos los escritos y así hacernos una idea de qué se trata en realidad esto.

Uno de los folios encontrados está escrito en un idioma que no conozco a pesar de ser un reconocido políglota. Y ha sido esta capacidad para los idiomas lo que me ha hecho acercar una traducción lo más cercana a lo que pudiera ser la realidad. No estoy seguro de ello, pero no tengo más datos para su traducción. Este escrito parece ser una carta cuyo significado se le escapa a mi comprensión.

José Antonio Soria Estevan


PS: No creo que haga falta explicación alguna de los hechos anteriores a la descripción de los escritos, (me refiero al párrafo en cursiva) porque ellos mismos se van definiendo, diluyendo y conformando un tejido arácnido, si cabe, que algún día pudiera ser la Biblia de las nuevas generaciones.
Los espero con ansiedad.

Un saludo.
José Antonio Soria Estevan.
jsoriaestevan@yahoo.es

1 comentario:

Anónimo dijo...

Veré si encuentro algún folio de los extraviados, aunque me temo que no hayan llegado a mi desván...